domingo, 11 de noviembre de 2012

EN LA CRESTA DE UNA OLA



“En la cresta de una ola”

 
En la cresta de una ola

me puse yo a navegar.

Era como un alma sola

en este tranquilo mar

 
Y tras recorrer sus costas,

a una cala fui a parar.

Os voy a contar las cosas

que vi yo en ese lugar


Me encontré con una gente

afable, sencilla y buena

que ama, que adora y que siente

a su virgen marinera.

 
Esa gente que se vuelca,

cuando en julio llega “el Carmen”,

paseando por la arena

tan maravillosa imagen

 
Me encontré con una torre

que evoca tiempos pasados

y que el turista visita

absorto y ensimismado.

 
Vi varadas en la arena

algunas embarcaciones,

refugio de unas sirenas

que murieron de ilusiones.


Y ya a finales de julio

vi yo un recinto ferial

donde todo es luz y júbilo

fiesta y cordialidad.

 
Es la feria de la Cala

una feria muy “salá”

Allí todo el mundo canta

y disfruta una “jartá”

 
Y antes de terminar

esta estupenda visita,

os diré una cosita

que seguro os gustará:

 
No os perdáis “la luna y playa”,

son noches para soñar

y cada noche que haya

disfrutaréis de verdad

 
¡Qué bonita que es la Cala!

¡Qué playas tan despejadas!

¡Qué gente tan pinturera!

¡Y qué suerte disfrutarla!

(Carlos de la Haza)



martes, 30 de octubre de 2012

UN POEMA REFRESCANTE



Poema refrescante

En este sitio entrañable, de mi tierra Andalucía,

celebramos, año a año, unas jornadas festivas.

Compartimos sol y playa con gente amable y tranquila

que disfruta con nosotros de este estupendo clima.

 
¡Que empiece la fiesta, que llegue el verano!

¡Que alegren sus vidas las gentes del campo!

¡Que llegue a la Cala de nuevo la feria!

¡Que todos vivamos contentos la fiesta!

 
Se presenta el mes de julio con alegría y con arte,

con mañanas agradables y tardes interminables.

Con noches maravillosas que parecen invitarte

a disfrutar de esa brisa que todo, todo, lo invade

 
¡Que empiece la fiesta, que llegue el verano!

¡Que alegren sus vidas las gentes del campo!

¡Que llegue a la Cala de nuevo la feria!

¡Que todos vivamos contentos la fiesta!

El verano acaba de llegar.

La diversión está garantizada,

Es el momento de iniciar

¡¡La gran feria de la Cala!!

 
¡Que empiece la fiesta, que llegue el verano!

¡Que alegren sus vidas las gentes del campo!

¡Que llegue a la Cala de nuevo la feria!

¡Que todos vivamos contentos la fiesta!



martes, 25 de septiembre de 2012

LAS LUNAS DE MARTE






Las lunas de Marte



Llegarán mis sueños hasta el recodo del río.

Subiré a la noria que trasiega incesante.

Las aves surcarán choperas y alamedas

y estaré en la orilla, avizor y expectante,

con mis ojos cansados, cegados de espera,

deseando que vuelvan las lunas de Marte…



Mis sentidos, saturados de tanto paisaje,

me traerán el frescor de verdes praderas.

Nacerán las rosas de mi huerto salvaje

y volverá el fragor de eterna primavera.

 Soñando espiaré en mi noche triunfante

deseando que vuelvan las lunas de Marte.

Carlos de la Haza

jueves, 21 de junio de 2012

LIBRERÍA INTERNACIONAL DIGITAL PARA NIÑOS/AS




 (A Library for the World's Children)

       La Fundación ICDL (International Childrens’s Digital Library) ha creado una web que abarca a toda una librería internacional de Literatura Infantil. En ella podemos encontrar obras de muchos países y en varios idiomas.

      El objetivo que pretende esta Fundación es construir una colección de libros que represente libros históricos y contemporáneos destacables de todo el mundo. En última instancia, la fundación aspira a tener representaciones de todas las culturas y los idiomas, para que todos los niños puedan conocer y apreciar la riqueza de la literatura infantil de la comunidad mundial.

      Si nos adentramos en esta web podremos comprobar cómo una gran cantidad de obras de Literatura Infantil están disponibles para su lectura "online" en varios idiomas. Así aquellos alumnos/as que tengan que hacer algún trabajo de clase sobre alguna obra concreta, poedrán servirse de esta ayuda que nos ofrece la ICDL.

      Espero que os sea de mucha utilidad y que podáis aprovechar este magnífico recurso digital que se pone a vuestra disposición

Aquí os dejo la direción:


jueves, 14 de junio de 2012

NUEVA INICIATIVA DEL INSTITUTO CERVANTES



 
"EL INSTITUTO CERVANTES PONE A DISPOSICIÓN DE SUS USUARIOS UN CATÁLOGO CON MÁS DE 3000 LIBROS ELECTRÓNICOS"


     Los libros electrónicos incluidos en este catálogo abarcan desde la lingüística, a obras literarias clásicas y contemporáneas de autores españoles e hispanoamericanos, así como historia, arte y literatura infantil.

     El objetivo es el mismo que el de las colecciones físicas de la red de bibliotecas del Instituto Cervantes, que supera el millón de volúmenes, o sea, promocionar la cultura y la lengua de España e Hispanoamérica a través de la red

     Hay tres modalidades: la descarga libre, para publicaciones propias del Instituto Cervantes y para títulos libres de derechos de autor; el préstamo, destinado a los libros sujetos a derechos de autor y que disponen de una protección anticopia con un plazo de préstamo de quince días; y la lectura, para obras que se pueden leer o ver en línea, como los videocuentos

     Aplaudimos esta iniciativa y nos congratulamos mucho, ya que nos permite consultar, leer y disfrutar de un amplio catálogo de obras literarias en lengua española


     El Instituto Cervantes pone en marcha en su red de bibliotecas un nuevo servicio con préstamos y descargas de libros electrónicos, con un catálogo de más de 3.000 obras.

miércoles, 16 de mayo de 2012

SEGUNDA NOVELA DE ALBERTO MONTERROSO

LA CÓRDOBA DE CLAUDIO MARCELO


     Alberto Monterroso Peña nos presenta su segunda novela histórica. En esta ocasión nos recrea la Córdoba de Claudio Marcelo, es decir, la Córdoba fundada por el pretor,  tres veces cónsul y senador romano.

    "La Córdoba de Claudio Marcelo" nos descubre la época romana con el mismo rigor histórico con el que trató su primera novela "El emperador impasible"

     El gusto literario con el que Alberto nos presenta a sus personajes, tanto reales como de ficción, nos produce una avidez de lectura y unas ganas tremendas de avanzar en la trama hasta llegar al final de la obra.

     Con un vocabulario ajustado y sencillo esta novela nos permite adentrarnos en las calles y plazas de la que habrá de configurarse como la Corduba del Siglo II a de C. muchas de cuyas huellas han quedado patentes a lo largo de la historia y se nos presentan como una realidad palpable en la actual Córdoba.

     Se dice que Claudio Marcelo fundó oficialmente Colonia Patricia Corduba en fecha indeterminada del tercer cuarto del siglo II a.C. Desde este momento, y hasta la definitiva desaparición de la Cordoba íbera en el siglo I a.C. coexistieron ambas comunidades en un entorno bastante cordial, apesar de las lógicas escaramuzas que se prodigaban en la época.  Esas buenas relaciones y la importancia de la ciudad íbera queda patente en el hecho de que la nueva ciudad romana adoptara el nombre de la antigua ciudad íbera: Corduba.

     A lo largo de la obra podemos disfrutar de pasajes históricos que nos permiten recrear el entorno político - social y militar en el que se desenvolvió la vida del pretor Claudio Marcelo.

     Con estas líneas queremos dar la enhorabuena a Alberto Monterroso y agradecer el trabajo de difusión de los valores de nuestra ciudad patrimonio universal de la humanidad

domingo, 15 de abril de 2012

COLORES (TERCER ACTO)

  C O L O R E S



(TERCER ACTO)

“Han vuelto los colores”


(Se inicia el acto con la canción “Au pays des couleurs” y con la entrada en escena de los personajes.- En un principio aparecen radiantes de felicidad Luisa y Loli)



Luisa:- ¿Es increíble! ¿Cómo han podido volver los colores! ¡Qué alegría!
Loli:- ¡Gracias a Dios que han vuelto! Yo ya creía que no volveríamos a tener colores.
Luisa:- ¡Ha tenido que ocurrir algo extraordinario!. ¡Parece un milagro que podamos disfrutar de nuevo de los colores!. ¡Es todo tan distinto!…
Loli:- ¡A mí me parece todo tan maravilloso!… ¡Gracias, muchas gracias al que nos haya devuelto los colores!.
Luisa:- Mira, por ahí vienen Bolo, Rani y Laura
Laura:- ¡Hola, hola a todos! ¿Qué bien, verdad?… ¡De nuevo tenemos colores!. ¡De nuevo podemos disfrutar de su luminosa y encantadora compañía.
Luisa:- ¿Y cómo habrá podido ocurrir?
Bolo:- ¡Ni idea!, pero sea como sea, a mí me parece fantástico lo que ha pasado.
Loli:- Es curioso. Todo ha empezado a cambiar desde el momento en que decidimos ir a pedirle disculpas a Badi
Rani:- Es verdad, pero… ¿y alguien lo ha visto a últimamente?. ¿Alguien le ha pedido disculpas a ese niño?
Loli:- Yo no lo he visto
Luisa:- Yo tampoco.
Laura:- Ni yo. Yo no lo he visto desde hace bastante tiempo.
Rani:- Tal vez Sara lo haya visto y haya hablado con él.
Loli:- Sara es la que menos interés tenía en hacer las paces con Badi.. Así que no creo que ella haya hablado con él. Y además, ¿Qué tiene que ver una cosa con otra?
Luisa:- Puede que tenga mucho que ver. Tú fíjate que los colores han regresado cuando nosotros hemos decidido hablar con Badi.
Loli:- Pues habrá que pensar que esa caja era verdaderamente “una caja mágica”
Laura:- O que su maquinita maravillosa haya servido para darnos un escarmiento
Bolo:- Pronto saldremos de dudas. Por ahí viene Sara con Paco.
Paco:- Hola amigos, ya me ha contado Sara lo mal que lo habéis pasado.
Sara:- ¡Qué bien! ¡Ya puedo presumir de nuevo! ¿Cómo habrán vuelto? ¿Tenéis idea de cómo ha ocurrido?
Loli:- No, no tenemos ni idea. Estábamos pensando que tú podrías saber algo.
Sara:- ¿Quién, yo? ¿Por qué lo dices?
Loli:- Por nada, por nada.
Luisa:- ¿Tú has hablado con Badi?
Sara:- No, yo no. ¿Por qué?
Loli:- Es que ocurre que, desde el momento en que se nos ocurrió ir a buscar a Badi para pedirle perdón, los colores volvieron a aparecer y todo volvió a ser como antes.
Sara:- Sí, es verdad… Parece que nuestro arrepentimiento ha servido para recuperar los colores.
Luisa:- Y sin embargo, ninguno de nosotros ha hablado con él… Ahí está el misterio.
Paco:- Yo si lo he visto hace un rato y he hablado con él.
Rani:- ¿Y que te ha dicho?
Paco:- Me ha dicho que estaba muy contento y que todo, a partir de ahora, sería mejor.
Bolo:- ¿Dónde lo has visto?
Paco:- Estaba en el jardín del Duque y dice que venía de enterrar al ladrón de los colores.
Todos/as.: - (poniendo cara de asombro) ¡CÓMO!
Paco: Sí, eso es lo que me dijo y esa cara de susto es la que yo puse cuando me lo contó.
Loli:- Pero, hombre, ¿Cómo te va a decir que viene de enterrar al ladrón de los colores?
Paco:- Que sí, que sí… eso es lo que me dijo y además me lo dijo muy contento y satisfecho por haberlo hecho.
Luisa:- ¡Anda ya!… No digas disparates…. ¿Cómo iba a estar tan contento después de hacer una barbaridad como esa?
Paco:- ¡Te lo juro! Estaba más contento que unas “pascuas”.
Laura:- ¡Pues, no hay quien lo entienda!… ¡Decir que ha enterrado al ladrón de colores y encima quedarse tan contento!… ¡No me lo explico!
Paco:- Pues yo sí… Yo si me lo explico. Además estoy de acuerdo con todo lo que ha hecho…

(Todos ponen una cara de asombro tan grande que parece que están viendo a un demonio)

Rani: ¿Pero,… tú sabes lo que estás diciendo? ¡Por favor!
Sara:- ¿Cómo puedes decir esa barbaridad, Paco?
Loli:- Paco, Paco, ¿Tú estás bien de la cabeza?… ¿Cómo puedes decir eso…?
Luisa:- Esto es increíble… ¡Mira que decir que está de acuerdo!… ¡Vamos!…¡Vamos!…
Bolo:- ¡A ver, a ver… explícate!
Paco:- Badi estuvo escuchando vuestra conversación y se enteró de que le queríais pedir perdón y de que os queríais llevar bien con él. Así que cogió al “ladrón de los colores”, lo destruyó y lo llevó a enterrar a la otra punta del parque
Laura:- Pero, bueno ¿ Y cómo es eso de que destruyó al ”ladrón de los colores”?
Paco:- ¡Muy fácil! El ladrón de los colores no era ni más ni menos que su maquinita. Así que cuando se enteró de vuestras buenas intenciones, destruyó esa maldita máquina y la enterró al otro lado del jardín. De esa manera ya no volverán a desaparecer los colores.
Bolo:- Ahora lo comprendo todo…
Sara:- Prometo que no volveré a tomarle el pelo a Badi
Rani:- Yo me comprometo a jugar con él todos los días.
Laura:- Yo estoy dispuesta a ser amiga de Badi toda la vida.
Luisa:- Yo le pediré disculpas y le ofreceré mi amistad
Loli:- ¡Viva Badi! Y ¡Vivan los colores! Todos/as-: ¡¡Viva!!
Sara:- Y vosotros: niños y niñas, hombres y mujeres aprended bien la lección y no os burléis nunca de vuestros semejantes

(Finaliza la obra con la música de “Je suis une petite grenouille” .- Todos cantan y gesticulan)

sábado, 10 de marzo de 2012

COLORES (SEGUNDO ACTO)


"C O L O E S"


(SEGUNDO ACTO)

       Prosiguiendo con la obra iniciada en la entrada anterior, aquí os dejo la segunda parte de "Colores". Dentro de un par de semanas subiré el tercer acto. Espero que sea de vuestro agrado.

“ Un ladrón muy sospechoso ”


(Suena la canción Qui a volé le rouge?...y aparece en escena un personaje extraño con una extraña caja blanca en sus manos. Se dirige al público y comenta...)

Badi: - ¿Habéis visto lo malos que son esos niños y niñas?… ¿Os habéis dado cuenta de cómo me tratan?… ¿Habéis visto lo egoístas que son?… Pues, ya tenía yo ganas de vengarme un poco de esos malvados…. Se pasan la vida haciéndome sufrir…. Se burlan de mí…. Se pasan el día presumiendo… Sí, sí, presumiendo… No quieren cuentas conmigo... Pues ahora me toca a mí…. Ahora soy yo el que... ¡Alguien viene!... Se oyen pasos... Seguro que son ellos... Seguro... ¡Niños!, ¡Niñas! ¡Señoras!, ¡Señores!... ¡No digáis nada, por favor!

(En ese momento entra Sara en escena con cara de enfado y sin reparar en la presencia de Badi) (Éste la llama)

Badi:- Hola, Sara
Sara: - ¡Hola Badi! (sin hacer mucho caso al saludo)
Badi: - ¿Ocurre algo?... Te veo muy triste...
Sara: - ¿Qué? ... No, nada, no me ocurre nada...

(Dirigiéndose al público, Sara comenta)

Sara: - Dice que me ve algo triste.... Si él supiera que estoy desesperada... Que desde que perdimos los colores ya no soy nada... Que ya no puedo presumir como antes... que mi vida ahora y así es un desastre...
Badi:- ¿Puedo hacer algo por ti? ¿Puedo ayudarte?
Sara: - No, nada... no puedes hacer nada... Bueno, sí, puedes hacer algo: puedes dejarme tranquila ¿vale? Anda, vete por ahí y no vuelvas.
Badi: - Si tú lo dices...
Sara:- (Dirigiéndose al público) – Nada, que no hay manera. Llevo un montón de horas buscando los colores y no hay ni rastro. Y ahora viene el pelma este a decirme que si me pasa algo…
Badi:- ¿Buscando los colores?... ¿Dices que estás buscando los colores? …
Sara:- ¡Ya estamos otra vez!... No te digo yo que éste no se entera de nada... Anda, anda, .Vete por ahí ya y no vuelvas. No vuelvas nunca ¿Te enteras?
Badi:- Si yo pudiera ayudar en algo...
Sara:- Pero tú… tú en que vas a ayudar. Si tú no te enteras de nada. ¡Anda, anda y desaparece! Tú, pedazo de monigote... Tú, con esa pinta que tienes… tú, que pareces una alcachofa frita…

(Badi se retira con cara de tristeza y dando a entender al público que él sabe algo importante. En ese momento entran Luisa, Rani, Loli y Laura con cara de pocos amigos)

Luisa:- ¡Ya estamos aquí, Sara! Y ya se ve que tú tampoco has tenido suerte...
Rani:- Aquí estamos igual que nos fuimos... Bueno, igual no. Estamos mucho más cansados y bastante más desesperados.
Sara: - Yo si que estoy al borde de un ataque.. ¡Estoy roja de ira!. Perdón, roja no... Estoy totalmente blanca de ira... ¡Ojalá pudiera estar roja!
Luisa:- Tampoco hija, no creo que sea para ponerte tan enfadada...
Sara:- ¡Claro que sí!... Tengo más motivos que nadie para estar super enfadada. Ten en cuenta que yo sin colores no soy nada... Además he tenido que aguantar al pelma de Badi
Laura:- ¡Ya estamos otra vez!. Sara, no debes ser tan mala con Badi
Rani:- Ese... ¿Y qué quería ese pamplinas?
Sara:- Pues, preguntarme a mí que si me pasaba algo... Vamos, vamos... esto es increíble.. Le he dicho que emigre… que vuele… que huya… que se quite de mi vista… que no quiero ni verlo… que me deje tranquila… o sea, intranquila, que es como estoy. Pero nada, él como si nada…
Luisa:- ¡Vale, vale!, déjalo. Ya sabemos que es muy soso y que nos cae mal a todos, pero tampoco hay que pasarse...
Sara:- Yo no me paso... Yo creo que me quedo corta... No lo soporto... Es un pimiento verde. No, ahora no es un pimiento verde, sino un pimiento azul... digo... blanco... eso blanco… ¡ES UN PIMIENTO BLANCO!
Loli:- ¿Sabéis algo de Bolo?
Luisa:- No, pero yo creo que está al venir.
Laura:- Yo lo he visto un momento cuando pasaba por la esquina de mi casa.
Rani:- Oye, ¿Le habéis preguntado a Badi, si sabe algo de la desaparición de los colores?
Sara:- No creo que merezca la pena... Con lo despistado que es... lo mismo le preguntas y te dice que: qué son los colores, oque el no entiende de barcos, o algo por el estilo. Ya sabes… él está en sus cosas
Luisa:- Mira, por ahí viene Bolo.
Bolo:- (entrando en el escenario con cara destemplada) Nada. Llevo un montón de tiempo buscando y no he encontrado ningún color ¿Y vosotros habéis encontrado algo?
Rani:- Ni rastro. Estamos desolados.
Loli:- Pues, yo no estoy dispuesta a quedarme así. Tengo que encontrar los colores como sea. No puedo quedarme sin colores. No lo soporto. No sería capaz de vivir sin colores…
Bolo:- He visto a Badi por el camino y me ha dicho que le gustaría ayudarnos
Laura:- Pero, ¿Cómo nos va a ayudar ese mendrugo?
Bolo:- Pues… no sé, no sé. Tal vez deberíamos tenerle un poco más de respeto.
Rani:- Puede que sí… Tal vez nos estamos portando muy mal con él
Bolo:- Es curioso: él está siempre serio y con cara de aburrido. Sin embargo, hoy lo he visto muy contento
Luisa:- Ea, lo que son las cosas… Ahora le toca a él estar contento. Ahora que estamos nosotros tan tristes.
Bolo:- Oye, ¿Qué llevaría en esa caja blanca?
Sara:- Alguna de sus cosas: Tal vez un montón de gusanos hambrientos… o una tortuga sin caparazón, o un botijo hecho pedazos… Yo que sé…
Laura:- ¡Qué barbaridad, Sara, no dejas ni un momento de insultar a Badi! ¿Tan mal te cae?
Bolo:- No sabemos lo que puede llevar en esa caja, pero él no hace nada más que acariciarla. Me dijo que era una máquina muy especial
Loli- Es curioso. Se le veía más contento que nunca…
Bolo:- Eso mismo le he dicho yo
Sara:- Eso son tonterías…. Bueno, ¿seguimos buscando, o no?
Rani:- ¡Claro que sí… Tenemos que seguir buscando y buscando hasta encontrar los colores.
Laura:- Yo creo que antes de seguir buscando deberíamos hablar con Badi y deberíamos pedirle disculpas por todas las burlas que le hacemos y por lo mal que lo tratamos.
Loli:- Pensándolo bien, creo que tienes razón. Nos hemos pasado un poco
Sara:- Puede que sea lo mejor. Además… mirándolo bien, no es tan pelma ni tan soso como parece.
Rani:- La verdad es que nunca nos hemos portado bien con él. Yo estoy de acuerdo con vosotros: hay que hablar con él y pedirle disculpas.
Bolo:- Así por lo menos haremos algo bueno hoy. Porque con la pérdida de los colores todo nos ha ido tan mal..
Laura:- Vaya, vaya, ya parece que empezamos a ser un poco razonables. Ya decía yo que nos estábamos pasando un poco o un mucho con ese muchacho.

(Se marchan y acto seguido aparece Badi. Con cara de satisfacción, se dirige al público y le agradece su silencio)

Badi:- ¡Gracias!. ¡Muchas gracias a todos por no haberle dicho nada a esos ”mequetrefes”! Ya me he enterado yo de cuáles son sus intenciones… He estado escuchando todo lo que decían y he visto que están dispuestos a portarse bien conmigo. Os voy a contar un pequeño secreto: ¿Sabéis lo que llevo aquí en esta caja? Es una maquinita… sí, sí… una maquinita que vale para muchas cosas… Es un artefacto prodigioso…. Es una máquina capaz de hacer un montón de cosas espectaculares…

(Comienza a pasear por el escenario y a hacer gestos, como si estuviese pensando en sus cosas, como si estuviese disfrutando de la situación… Luego vuelve dirigirse al público y comenta en voz alta:)

Badi:- Ya os habréis dado cuenta que ellos siempre se estaban burlando de mí… Que no querían que jugase con ellos. Que siempre me han considerado como un “bicho raro”. No se han portado bien conmigo. Son unos presumidos, pero yo, yo no soy como ellos. Yo no soy un presumido. Yo no soy vengativo. Yo no soy como ellos.

(Vuelve a dar unos paseos por el escenario y por fin se decide a marcharse. Antes de hacerlo le pregunta al público )

Badi:- ¿Os gustaría que volviesen a existir los colores? ¿Os gustaría encontrar de nuevo un mundo lleno de colores?
¿Qué os parece si pongo en marcha mi “maquinita”, mi máquina prodigiosa? Y ya veremos la cara que ponen
Les daremos una gran sorpresa, pero no digáis nada a nadie ¿Vale?

(Finaliza el segundo acto con la salida de escena de Badi y su caja maravillosa)

domingo, 26 de febrero de 2012

COLORES (PRIMER ACTO)

"C O L O R E S"

(PRIMER ACTO)

      Con el título "Colores" elaboré, allá por el año 2001, una obrilla de teatro. La intención era participar en el Concurso Provincial de Teatro Infantil que cada año celebraba la Excma. Diputación Provincial de Córdoba. "Colores" fue representada en el VIII Concurso de teatro infantil  y obtuvo un segundo lugar en la fase local de Córdoba. A lo largo de sus tres actos vemos como un grupo de niños y niñas están muy preocupados por la repentina desaparición de todos los colores, excepto el blanco. El respeto a los demás y la convivencia son los valores que se hacen resaltar en este texto literario. Espero que os guste. Como quiera que es demasiado amplia, os iré colocando, en entradas sucesivas, cada uno de los tres actos

 “Todo está blanco”

(Se abre el telón con la canción titulada “Dans le pays blanc”. Rani y Bolo están dormidos y al finalizar la canción despiertan y encuentran que todo está blanco. Se quejan de lo triste que está todo sin colores. Ambos van vestidos de blanco total)

Rani: - ¿Qué ocurre? ¿Qué es lo que pasa? ¿Cómo es que estamos así?
Bolo:- ¿Qué ha pasado? ¿Cómo es que no tenemos nada más que color blanco?
Rani:- ¡Esto es increíble!
Bolo:- ¡Esto parece magia!
Rani:- Pues a mí no me gusta esta magia. Yo prefiero la magia de los colores.
Bolo:- ¡Toma! Y yo también... A mi no me gusta ser un fantasma. A mí me gusta ser una persona normal y corriente.
Rani: - ¡Qué pena! ¡Qué tristeza!. ¡Todo está tan aburrido!
Bolo: - Es verdad. Ahora todo es mucho más triste.
Rani: - Hay que buscar una solución.
Bolo: - Tienes razón. Así no podemos seguir.
Rani: - ¿Qué podríamos hacer?
Bolo: - No se me ocurre nada, pero creo que tenemos que seguir pensando y pensando hasta que encontremos la solución.
Rani: - ¡Colores!... ¡Colores!... ¿Dónde estáis?.... ¿Dónde os habéis metido?... ¡Colores!... ¡Colores!... ¡Contestad por favor!. ¿Dónde estáis?
Bolo: - No insistas. Ya ves que no hay ni rastro de ellos. Ha tenido que ocurrir algo muy malo y por eso han desaparecido.
Rani: - Se me ocurre una idea: voy a escribir una carta y voy a pedirles que vuelvan.... Oh, pero sólo tengo el color blanco para escribir. Y así no puedo escribir nada.
Bolo: - Blanco con blanco no sirve para nada. Todo lo que escribas con el blanco sobre el blanco, quedará en blanco y no se podrá leer.
Rani: - Pues tienes razón, habrá que pensar en algo nuevo... Se me ocurre que podríamos hacernos una herida y pintar algo con la sangre. Así podríamos recuperar el rojo. ¿Qué te parece la idea?
Bolo: - La idea es muy buena, pero el resultado va a ser muy malo.
Rani: - ¿Por qué dices que el resultado será muy malo?
Bolo: - Porque desde que hemos perdido los colores nuestra sangre es blanca, nuestras lágrimas son blancas, nuestro sudor es blanco, nuestros mocos son blancos... Todo, todo es blanco... No tenemos colores, sólo tenemos blanco ¿Lo entiendes?: Blanco, blanco y blanco. Y nada más que blanco.
Rani: - Está bien, está bien... Perdona... No te pongas así..... Ya se me ocurrirá algo mejor.
Bolo: - Yo no estoy enfadado contigo... Yo estoy enfadado con lo que nos ha pasado. Estoy triste porque lo veo todo muy negro, es decir, muy blanco.

(Entran en escena, de manera progresiva, también vestidos de blanco, Luisa, Loli, Sara y Laura. Van llegando de una en una y todas se encuentran apenadas por no poder encontrar ningún color distinto al blanco)

Luisa: - ¡Buenas tardes, buenos días, buenas noches, o buenas lo que sea!. Ahora resulta que todo, todo, todo está blanco, ya no sabemos si es el día o la tarde o la noche o la mañana. ¿Cómo estáis?
Bolo: - Mal, muy mal. Estamos enfadados y tristes.
Rani: - Estamos super - enfadados. Llevamos todo el día, o toda la noche, o toda la mañana, o todo lo que sea tratando de encontrar a los colores, pero nada... ni rastro.
Luisa: - Es todo tan extraño... Yo no sé lo que ha podido pasar... ¿No estaremos soñando?
Bolo: - Seguro que no... Yo me he pegado pellizcos para ver si era un sueño y ya ves, me he puesto la cara morada, perdón, blanca de dolor. Así que de sueño, nada de nada. Esto es real, tan real como nosotros mismos.
Luisa: - ¡Pues sí que estamos apañados!...
Rani: - ¡Pues si que estamos “blanqueados”, digo... “cabreados”!
Luisa: - Estoy pensando... ¿Y si rompemos un huevo y sacamos el amarillo?... ¿Qué os parece la idea?... Excelente, ¿verdad?...
Loli: - He oído lo que decías y me parece que esa idea es bastante buena, pero el resultado será muy malo. Ten en cuenta que las yemas de los huevos han perdido su color y ahora son todas blancas... Las tortillas son blancas... Las fresas son blancas... Las zanahorias son blancas...
Luisa:- Oh, ¡Qué pena!. Eso no lo había yo pensado. ¡Claro!, si todo está blanco, es lógico que las yemas de los huevos también estén blancas. Así que mi idea no vale. Habrá que pensar en alguna otra cosa.

(En ese momento aparece Laura que ha oído la última frase de Luisa)

Laura:- ¿Por qué dices que habrá que pensar en otra cosa? ¿Acaso habéis pensado ya en algo para localizar los colores?
Rani: - Hasta ahora no han servido para nada ninguna de las ideas que hemos tenido. Todos los intentos han sido negativos.
Laura: - Lo siento, lo siento, pero es que estamos tan nerviosos... Creo que tenemos que buscar entre todos alguna solución... algo que nos permita recuperar los colores... algo que nos devuelva la alegría.
Luisa: - No te preocupes, Laura, ya encontraremos algo. Hay que seguir pensando en otras posibles soluciones.
Loli: - (rascándose la cabeza, como si estuviera pensando) Estoy yo pensando... Se me está ocurriendo una idea... Y si raspamos blanco con blanco durante un buen rato...
Laura: - A ver, a ver, explícate... ¿Qué quieres decir con eso de “raspando blanco con blanco”?
Loli: - Digo que, tal vez, si cogemos dos papeles, o dos trozos de madera y los frotamos con fuerza, puede que... puede que... puede que salga humo.
Rani: - Y ese humo será blanco, seguro... No podrá ser de otro color.
Loli: - Pero, y si seguimos frotando, y frotando, y frotando... no saldrá humo: saldrá fuego y ese fuego será...
Todos: - ¡ Será blanco !
Loli: - Es verdad, será blanco, porque al no existir otro color no podrá ser nada más que blanco. Pero a pesar de todo, yo voy a hacer la prueba.
Luisa: - Te acompaño. Yo te ayudaré a frotar los palos hasta que consigamos sacar humo y fuego.
Laura: -¿Qué esperáis encontrar? ¿Un color nuevo a partir del blanco?. Eso es muy difícil, por no decir imposible. Además debéis de tener mucho cuidado. Ya sabéis lo peligroso que es jugar con fuego.
Loli: - No vamos a jugar. Vamos a experimentar.
Luisa: - Eso, eso, vamos a hacer un experimento científico.

(En ese momento entra Sara, también preocupada por la falta de colores)

Sara: - Ya veo que no tenéis buena cara. A mí me ocurre lo mismo. Desde que se fueron los colores, estoy “más aburrida que una sopa sin cuchara”.
Luisa:- Hola Sara. Aquí nos tienes haciendo toda clase de experimentos para resolver esto, pero nada... No conseguimos recuperar nuestros colores:” los colores de toda la vida”.
Laura:- Tú no tendrás idea de dónde pueden estar ¿verdad?
Sara:- ¡Qué más quisiera yo!... Sólo os puedo decir que llevo mucho rato pensando y que se me ha quedado la mente en blanco. (llorando) ¡Ojalá que todo fuera un sueño, un desgraciado sueño!
Bolo: - Vale, vale, no te pongas así... que nos vas a hacer llorar a todos.
Luisa: - Ah, y muy bien dicho eso de que te has quedado con la mente en blanco
Sara: - Es que no lo puedo remediar... ¡Con lo que me gustaba a mí presumir con mis trajes de colores, con mis zapatos de colores, con mis felpas de colores, con mis lápices de colores!...
Rani: - Ya, ya lo sabemos. ¡Con lo que te gustaba a ti presumir con todo!... y ahora, ya ves, ahora no puedes presumir nada más que de blanco.
Sara: - ¿Y no será esto un castigo por tanto presumir?
Bolo: - No sé, no sé... (pensando) Pero todo esto me parece a mí muy raro... Tal vez nos merezcamos esto... No sé, no sé....
Sara: - ¿Qué os parece si nos repartimos el territorio y nos dedicamos a buscar esos colores que tanto deseamos? Mirad. Este es el mapa. Tú irás por aquí. Tú revisa toda esta zona. Tú por esa otra. Tú, por el noroeste. Yo me ocuparé de esta franja. ¿De acuerdo?
Luisa: - ¡Buena idea!. Haremos un registro a fondo. Llegaremos hasta el último rincón y no pararemos hasta encontrar los colores ¿vale?
Laura: - ¡ De acuerdo!. Dentro de un rato nos volvemos a ver aquí y que cada uno cuente como le ha ido.
Sara: - Cada uno sabe bien cuál es su zona, ¿verdad? (todos dicen que sí)
Bolo: - Pues, ¿A qué esperamos?... ¡En marcha! Ah.... Y ... ¡Suerte a todos!

(Finaliza el primer acto con la salida de los personajes en busca de los ansiados colores)

martes, 17 de enero de 2012

LA BICICLETA ENCANTADA DE MARTA

Marta Ortiz es una antigua alumna a la que prometí, no ha mucho, publicarle alguna de sus redacciones. Hoy he encontrado este trabajo que ella realizó en el curso escolar 2010-2011. Espero que os guste y que os sirva para recordar los buenos momentos pasados en clase. Ahí va tu trabajo, Marta.


"La bicicleta encantada"
      Había una vez dos hermanas que eran gemelas. Se llamaban Elisa y Marta. Nacieron el 29 de julio de 1.999. Ellas, eran completamente idénticas, pelo castaño, ojos verdes, no muy altas pero tampoco muy bajas, aunque a pesar de eso por dentro y su forma de ser era completamente distinta una de la otra.
      Elisa vivía en una casucha de muchísimos años, pues era de sus antepasados, se encontraba en las afueras de la ciudad de Lauther, vivía con su padre llamado Carlos, porque supuestamente la madre había muerto en un accidente de coche.
      Marta vivía en el centro de la ciudad, también de Lauther, ella sin embargo vivía en una casa inmensamente grande, vivía con su madre llamada Alicia, Marta no sabía nada de su padre, la madre nunca le habló de él.
      Carlos, tenía un bar por eso Elisa no podía permitirse comprar ropa, ni salir con sus amigos, siempre tenía que estar, ayudando a su padre podía permitirse comprar ropa, ni salir con sus amigos, siempre tenía que estar, ayudando a su padre, a ir a hacer la compra para las cosas del bar.
      Marta sin embargo pida salir con sus amigos, ir a comprar chucherías, podía ir a un colegio de pago, ir al dentista a comprar roda, podía hacer todo, pues el padre dejó a su mujer, la madre de Marta con muchísimo dinero.
      Un día de Noviembre que Marta venía por primera vez y obligada de comprar fruta se choco con Elisa que venía de unas clases gratuitas, porque no podía pagar sus estudios por la falta de dinero, al chocarse se cayeron las dos al suelo y los libros de Elisa y la fruta de Marta volaron.
Elisa-¡Ah!- Dijo Elisa tocándose el rasguño del codo.
Marta-¡Eh, tú!-¿Qué haces? ¡Mira por dónde vas! Dijo Marta mientras se pasaba la mano por la rodilla.
Elisa- Disculpa, no era mi intención...
      Marta dejándola entre palabras le respondió:
- ¿Que no era tu intención? Pues ya puedes ir teniendo más cuidado la próxima vez si no quieres meterte en líos.
      Elisa se disculpó de nuevo.
-Perdón...
      Elisa recogió las cosas de Marta, pero ella antes de que terminara de recoger todas las cosas se las quitó de las manos de malas formas y terminó de recogerlas ella, después de eso se marchó y entonces Elisa empezó a recoger sus libros y cuadernos prestados por algunas de sus vecinas.
      Cuando Marta llego a su casa se sentó en un gran sofá que había allí, pego un gran suspiro e intento descansar. Y la madre que era una “tiquis - miquis” soltó un profundo y nervioso:
      -¡¡¡¡MMMMAAARRRTTTAAAAAA!!!!!! Al verla así de sucia y con un pequeño rasguño en la rodilla.
Marta- no es nada, es solo que una pobre niña me ha empujado y me he caído.- Dijo Marta mirando a su madre fijamente.
      Sin embargo cuando Elisa llego a su casa, subió inmediatamente hacia su cuarto, se cambio rápido de ropa, la llevo a la lavadora y se curó aquella pequeña herida lo más rápido posible para que no la viesen, aunque no lo consiguió, su padre que era muy detallista se dio cuenta de que aquella ropa era la que se había puesto Elisa para ir a las clases, y como no la había oído entrar sabía que algo le había pasado, entonces muy decidido subió a la habitación de su hija.
Padre- Elisa, ¿qué te ha pasado? ¿Por qué traes la ropa tan sucia? ¿Y esa herida? ¿Cómo te la has hecho? Cuéntame.
      El padre, Carlos se sentó en la cama, al lado de Elisa.
      Elisa le miro e inmediatamente agachó la cabeza.
Elisa- Nada papá, me he caído al volver de las clases.
Padre- ¿Te has hecho mucho daño? ¿Estás bien?
Elisa- Sí, papá, sí, estoy bien...ahora vete, dijo Elisa con una sonrisa en la cara
      El padre se fue, y Elisa cerró de momento la puerta, se tumbó en la cama y empezó a llorar.
      En cambió Marta seguía mirando a su madre. Mientras ella seguía sin salir de su asombro.
Madre- ¿Pero...había mucha gente?
Marta- Alguna...
Madre- ¿Y cómo has podido dejar que te humillen de esa manera?
Marta- Mamá, es una pobre muchacha de la calle... déjala.
      La madre miró a Marta y se fue de aquella sala donde se encontraban.

      Dos años más tarde…


      Era Navidad, hacía mucho tiempo que Marta y Elisa no se veían.
      Un mes antes de Navidad el padre de Elisa y la madre de Marta habían hablado, pensaban que no podían seguir así...Alicia, la madre de Marta le dijo a Carlos que ellas tenían que verse, jugar, divertirse, estar juntar ya que eran hermanas, Carlos estuvo de acuerdo con lo que le comentó Alicia.
      Así que decidieron quedar para las navidades y pasarlas juntos, en familia, decidieron ir a otra ciudad a pasar las navidades.
      Cuando Marta y Elisa se enteraron por sus padres que eran hermanas, las dos se alegraron a pesar de aquella pelea en la calle, porque las dos sabían que a partir de ese día iban a poder jugar y divertirse las dos juntas y pasarlo en grande.
      Cuando llegó el momento de marcharse, Marta que era un poco "agarrada" y que nunca regalaba nada a nadie decidió regalarle la bicicleta a Elisa, una bicicleta mágica, que llevaba con Marta muchísimos años.
      Y a partir de ese día decidieron vivir todos juntos para siempre.
      Marta y Elisa salían todas las tarde al parque a jugar con su bicicleta.
                                                                
(Marta Ortiz, 6º de Primaria.- Colegio "Europa")