sábado, 10 de marzo de 2012

COLORES (SEGUNDO ACTO)


"C O L O E S"


(SEGUNDO ACTO)

       Prosiguiendo con la obra iniciada en la entrada anterior, aquí os dejo la segunda parte de "Colores". Dentro de un par de semanas subiré el tercer acto. Espero que sea de vuestro agrado.

“ Un ladrón muy sospechoso ”


(Suena la canción Qui a volé le rouge?...y aparece en escena un personaje extraño con una extraña caja blanca en sus manos. Se dirige al público y comenta...)

Badi: - ¿Habéis visto lo malos que son esos niños y niñas?… ¿Os habéis dado cuenta de cómo me tratan?… ¿Habéis visto lo egoístas que son?… Pues, ya tenía yo ganas de vengarme un poco de esos malvados…. Se pasan la vida haciéndome sufrir…. Se burlan de mí…. Se pasan el día presumiendo… Sí, sí, presumiendo… No quieren cuentas conmigo... Pues ahora me toca a mí…. Ahora soy yo el que... ¡Alguien viene!... Se oyen pasos... Seguro que son ellos... Seguro... ¡Niños!, ¡Niñas! ¡Señoras!, ¡Señores!... ¡No digáis nada, por favor!

(En ese momento entra Sara en escena con cara de enfado y sin reparar en la presencia de Badi) (Éste la llama)

Badi:- Hola, Sara
Sara: - ¡Hola Badi! (sin hacer mucho caso al saludo)
Badi: - ¿Ocurre algo?... Te veo muy triste...
Sara: - ¿Qué? ... No, nada, no me ocurre nada...

(Dirigiéndose al público, Sara comenta)

Sara: - Dice que me ve algo triste.... Si él supiera que estoy desesperada... Que desde que perdimos los colores ya no soy nada... Que ya no puedo presumir como antes... que mi vida ahora y así es un desastre...
Badi:- ¿Puedo hacer algo por ti? ¿Puedo ayudarte?
Sara: - No, nada... no puedes hacer nada... Bueno, sí, puedes hacer algo: puedes dejarme tranquila ¿vale? Anda, vete por ahí y no vuelvas.
Badi: - Si tú lo dices...
Sara:- (Dirigiéndose al público) – Nada, que no hay manera. Llevo un montón de horas buscando los colores y no hay ni rastro. Y ahora viene el pelma este a decirme que si me pasa algo…
Badi:- ¿Buscando los colores?... ¿Dices que estás buscando los colores? …
Sara:- ¡Ya estamos otra vez!... No te digo yo que éste no se entera de nada... Anda, anda, .Vete por ahí ya y no vuelvas. No vuelvas nunca ¿Te enteras?
Badi:- Si yo pudiera ayudar en algo...
Sara:- Pero tú… tú en que vas a ayudar. Si tú no te enteras de nada. ¡Anda, anda y desaparece! Tú, pedazo de monigote... Tú, con esa pinta que tienes… tú, que pareces una alcachofa frita…

(Badi se retira con cara de tristeza y dando a entender al público que él sabe algo importante. En ese momento entran Luisa, Rani, Loli y Laura con cara de pocos amigos)

Luisa:- ¡Ya estamos aquí, Sara! Y ya se ve que tú tampoco has tenido suerte...
Rani:- Aquí estamos igual que nos fuimos... Bueno, igual no. Estamos mucho más cansados y bastante más desesperados.
Sara: - Yo si que estoy al borde de un ataque.. ¡Estoy roja de ira!. Perdón, roja no... Estoy totalmente blanca de ira... ¡Ojalá pudiera estar roja!
Luisa:- Tampoco hija, no creo que sea para ponerte tan enfadada...
Sara:- ¡Claro que sí!... Tengo más motivos que nadie para estar super enfadada. Ten en cuenta que yo sin colores no soy nada... Además he tenido que aguantar al pelma de Badi
Laura:- ¡Ya estamos otra vez!. Sara, no debes ser tan mala con Badi
Rani:- Ese... ¿Y qué quería ese pamplinas?
Sara:- Pues, preguntarme a mí que si me pasaba algo... Vamos, vamos... esto es increíble.. Le he dicho que emigre… que vuele… que huya… que se quite de mi vista… que no quiero ni verlo… que me deje tranquila… o sea, intranquila, que es como estoy. Pero nada, él como si nada…
Luisa:- ¡Vale, vale!, déjalo. Ya sabemos que es muy soso y que nos cae mal a todos, pero tampoco hay que pasarse...
Sara:- Yo no me paso... Yo creo que me quedo corta... No lo soporto... Es un pimiento verde. No, ahora no es un pimiento verde, sino un pimiento azul... digo... blanco... eso blanco… ¡ES UN PIMIENTO BLANCO!
Loli:- ¿Sabéis algo de Bolo?
Luisa:- No, pero yo creo que está al venir.
Laura:- Yo lo he visto un momento cuando pasaba por la esquina de mi casa.
Rani:- Oye, ¿Le habéis preguntado a Badi, si sabe algo de la desaparición de los colores?
Sara:- No creo que merezca la pena... Con lo despistado que es... lo mismo le preguntas y te dice que: qué son los colores, oque el no entiende de barcos, o algo por el estilo. Ya sabes… él está en sus cosas
Luisa:- Mira, por ahí viene Bolo.
Bolo:- (entrando en el escenario con cara destemplada) Nada. Llevo un montón de tiempo buscando y no he encontrado ningún color ¿Y vosotros habéis encontrado algo?
Rani:- Ni rastro. Estamos desolados.
Loli:- Pues, yo no estoy dispuesta a quedarme así. Tengo que encontrar los colores como sea. No puedo quedarme sin colores. No lo soporto. No sería capaz de vivir sin colores…
Bolo:- He visto a Badi por el camino y me ha dicho que le gustaría ayudarnos
Laura:- Pero, ¿Cómo nos va a ayudar ese mendrugo?
Bolo:- Pues… no sé, no sé. Tal vez deberíamos tenerle un poco más de respeto.
Rani:- Puede que sí… Tal vez nos estamos portando muy mal con él
Bolo:- Es curioso: él está siempre serio y con cara de aburrido. Sin embargo, hoy lo he visto muy contento
Luisa:- Ea, lo que son las cosas… Ahora le toca a él estar contento. Ahora que estamos nosotros tan tristes.
Bolo:- Oye, ¿Qué llevaría en esa caja blanca?
Sara:- Alguna de sus cosas: Tal vez un montón de gusanos hambrientos… o una tortuga sin caparazón, o un botijo hecho pedazos… Yo que sé…
Laura:- ¡Qué barbaridad, Sara, no dejas ni un momento de insultar a Badi! ¿Tan mal te cae?
Bolo:- No sabemos lo que puede llevar en esa caja, pero él no hace nada más que acariciarla. Me dijo que era una máquina muy especial
Loli- Es curioso. Se le veía más contento que nunca…
Bolo:- Eso mismo le he dicho yo
Sara:- Eso son tonterías…. Bueno, ¿seguimos buscando, o no?
Rani:- ¡Claro que sí… Tenemos que seguir buscando y buscando hasta encontrar los colores.
Laura:- Yo creo que antes de seguir buscando deberíamos hablar con Badi y deberíamos pedirle disculpas por todas las burlas que le hacemos y por lo mal que lo tratamos.
Loli:- Pensándolo bien, creo que tienes razón. Nos hemos pasado un poco
Sara:- Puede que sea lo mejor. Además… mirándolo bien, no es tan pelma ni tan soso como parece.
Rani:- La verdad es que nunca nos hemos portado bien con él. Yo estoy de acuerdo con vosotros: hay que hablar con él y pedirle disculpas.
Bolo:- Así por lo menos haremos algo bueno hoy. Porque con la pérdida de los colores todo nos ha ido tan mal..
Laura:- Vaya, vaya, ya parece que empezamos a ser un poco razonables. Ya decía yo que nos estábamos pasando un poco o un mucho con ese muchacho.

(Se marchan y acto seguido aparece Badi. Con cara de satisfacción, se dirige al público y le agradece su silencio)

Badi:- ¡Gracias!. ¡Muchas gracias a todos por no haberle dicho nada a esos ”mequetrefes”! Ya me he enterado yo de cuáles son sus intenciones… He estado escuchando todo lo que decían y he visto que están dispuestos a portarse bien conmigo. Os voy a contar un pequeño secreto: ¿Sabéis lo que llevo aquí en esta caja? Es una maquinita… sí, sí… una maquinita que vale para muchas cosas… Es un artefacto prodigioso…. Es una máquina capaz de hacer un montón de cosas espectaculares…

(Comienza a pasear por el escenario y a hacer gestos, como si estuviese pensando en sus cosas, como si estuviese disfrutando de la situación… Luego vuelve dirigirse al público y comenta en voz alta:)

Badi:- Ya os habréis dado cuenta que ellos siempre se estaban burlando de mí… Que no querían que jugase con ellos. Que siempre me han considerado como un “bicho raro”. No se han portado bien conmigo. Son unos presumidos, pero yo, yo no soy como ellos. Yo no soy un presumido. Yo no soy vengativo. Yo no soy como ellos.

(Vuelve a dar unos paseos por el escenario y por fin se decide a marcharse. Antes de hacerlo le pregunta al público )

Badi:- ¿Os gustaría que volviesen a existir los colores? ¿Os gustaría encontrar de nuevo un mundo lleno de colores?
¿Qué os parece si pongo en marcha mi “maquinita”, mi máquina prodigiosa? Y ya veremos la cara que ponen
Les daremos una gran sorpresa, pero no digáis nada a nadie ¿Vale?

(Finaliza el segundo acto con la salida de escena de Badi y su caja maravillosa)